¿Cómo nos afectaría la propuesta de Sumar de prohibir vuelos cuando haya alternativa en tren?

P. V. LA VOZ

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GENERALITAT VALENCIANA | EUROPAPRESS

El partido de Yolanda Díaz incluye en su programa eliminar las conexiones aéreas domésticas cuando haya una opción en tren que tarde menos de 3 horas, similar a la medida aplicada en Francia. Desgranamos cuánto nos afectaría

10 jul 2023 . Actualizado a las 17:48 h.

Entre las medidas para combatir el impacto medioambiental del ser humano sobre el planeta, Sumar ha presentado una batería de propuestas que afectan, especialmente, al tráfico aéreo doméstico, con una norma, similar a otra aplicada hace poco en Francia, que prohibiría los vuelos dentro del territorio nacional entre aquellas ciudades en las que haya una alternativa en tren que tarde menos de 3 horas.

¿Cuál es la propuesta de Sumar y qué se pretende?

Sumar pide prohibir el transporte aéreo para los trayectos dentro de España en los que haya una alternativa ferroviaria menor de tres horas por el alto impacto medioambiental que tienen las conexiones aéreas.

Según el último informe medioambiental de la aviación europea —se elabora cada tres años—, los aviones que despegaron del espacio europeo entre el 2005 y el 2019 emitieron un total de 147 millones de toneladas de CO2, y se prevé que la tendencia podría llegar hasta los 188 millones de toneladas en el 2050 si no se toman medidas contundentes. Según ha razonado el portavoz de Sumar, «el transporte es el responsable del 30 % de las emisiones».

La propuesta planteada por la formación de Yolanda Díaz, en todo caso, no se queda solamente en esa medida, sino que forma parte de una batería de normas de limitación del tráfico aéreo para combatir su alto impacto medioambiental. Entre ellas, estarían también la de regular y limitar el uso de jets privados, así como un impuesto para viajeros frecuentes en avión, una tasa que sería «creciente» y que se aplicaría a partir del segundo vuelo en avión al año, aunque no se han concretado sus detalles.

¿Hay algún precedente de esta medida?

Sí, y muy reciente. Una ley similar entró en vigor en Francia el pasado mes de mayo.

Aunque la idea de Macron contemplaba un límite de cuatro horas en tren —el mismo límite proyectado inicialmente por Sumar—, las quejas de algunas regiones y de las aerolíneas llevaron a que finalmente se rebajase hasta las dos horas y media.

Pero la ambición de la norma inicial quedó bastante deslucida en la práctica, y finalmente solo se aplicará a las rutas aéreas entre París con Nantes, Burdeos y Lyon, y solamente desde los vuelos desde el parisino aeropuerto de Orly, y no desde el principal, el Charles de Gaulle.

Aunque hay otras rutas que sí contaban también con alternativa ferroviaria de dos horas y media entre las dos ciudades, la letra pequeña de la norma establecía varias condiciones que no se cumplían en la mayoría de los casos. En primer lugar, que el sistema ferroviario tenía que ofrecer alternativas y número de conexiones al día suficientes, y, por otra, que para el cálculo del tiempo en tren se tenía en cuenta el trayecto desde el aeropuerto, y no desde el centro urbano de las ciudades.

¿Afectaría a las conexiones aéreas con Galicia?

De momento, no. Aunque la propuesta inicial en el programa de Sumar pasaba por prohibir todos aquellos vuelos entre ciudades que tengan una alternativa en tren de duración menor a 4 horas, la propuesta final la ha reducido a 3. De este modo, en principio no afectaría a ninguna de las conexiones aéreas en Galicia, aunque por poco. Con la reducción de los tiempos gracias a la alta velocidad lograda en los últimos años, la ciudad gallega con aeropuerto a la que menos se tarda desde Madrid es Santiago, con una duración de entre 3 y 4 horas. Eso sí, en el momento en el que lleguen los trenes Avril, ese tiempo se recortará, previsiblemente, en unos 20 minutos, por lo que la conexión aérea Santiago-Madrid sí correrá peligro, ya que varios trayectos al día estarán por debajo de esas tres horas.

En las conexiones de Galicia con otras ciudades de España, sin embargo, los vuelos no corren ningún peligro, ya que están muy lejos de ese límite. Santiago está a, al menos, 7 horas de Barcelona en tren, y Bilbao, a 10 horas desde A Coruña o Santiago, por poner dos ejemplos de algunas conexiones aéreas.

¿A qué conexiones afectaría?

Entre los trayectos que se eliminarían, estaría el famoso y muy transitado puente aéreo entre Madrid y Barcelona, seguramente el que más impacto tendría debido al alto volumen de movimientos diarios entre las dos ciudades españolas más importantes. Pero habría también otras conexiones aéreas afectadas, entre ellas, la de Madrid con ciudades como Valencia, Sevilla o Málaga, y también, en teoría, el tren entre Barcelona y Valencia.