La jueza del Alvia, a un padre que perdió a su hijo en el accidente: «Entiendo su indignación, entiendo su lucha»

Pablo González
Pablo González REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Sala de vistas del juicio del Alvia, en la Ciudad de la Cultura de Santiago
Sala de vistas del juicio del Alvia, en la Ciudad de la Cultura de Santiago XOAN A. SOLER

La magistrada lanza una frase abierta a múltiples interpretaciones: «A lo mejor es otra jurisdicción la que debería resolver todo esto». La víctima reclama una «sentencia ejemplar» para que no se repitan accidentes como el de Angrois

30 mar 2023 . Actualizado a las 17:46 h.

Rogelio Bernardo perdió a su hijo en el accidente del Alvia en Angrois. Pero David no era un viajero, sino un trabajador del propio tren, un tripulante de cabina. Rogelio y su mujer, Gloria, y también su hija, relataron ante la jueza el «dolor inmenso» que les provocó la pérdida de su ser querido. «Dejé de ver a mis amistades, a mi familia, estaba quemado con todo el mundo», explicó Rogelio. Como otros comparecientes, destacó que la lucha en la plataforma de víctimas le sacó de ese agujero. «Voy a ver a mi hijo todos los sábados al cementerio. Y le cuento los resultados de la lucha», explicó. También destacó la ayuda de Christopher Carr, de la Agencia Ferroviaria de la Unión Europea, en su ya larga búsqueda de responsabilidades por el accidente como uno de los miembros más implicados de la plataforma. Estuvo poco tiempo con ayuda psicológica. «Lo estoy superando a base de lucha, la pelea con las instituciones», aseguró.

Sin embargo, lo más destacable fue el diálogo que mantuvo con la propia jueza, Elena Fernández Currás, respecto a una frase que la magistrada pronunció el martes pasado, cuando declararon otros padres que perdieron a su hijo en el accidente y la magistrada les confesó su temor de que ninguna sentencia fuera a satisfacerles del todo. Rogelio le dijo que después de diez años «va a haber una sentencia, pero no justicia». Aunque inmediatamente después le explicó que la sentencia «sí puede valer».

-Es la única forma de acabar el juicio, replicó la jueza

-A mi hijo no me lo a devolver nadie, pero como no haya una sentencia ejemplar... Si no, volverá a pasar, habrá quien vuelva a firmar en barbecho, dijo Rogelio en referencia al accidente y al proceso judicial, en el que están procesados el maquinista del Alvia y el jefe de seguridad del ADIF.

La jueza le explicó que su deseo es que finalmente la sentencia les satisfaga, aunque aseguró no estar de acuerdo con los reproches a la justicia. «No le hago reproches, todo lo contrario, siempre hemos colaborado con la justicia». Fue en ese momento cuando la jueza pronunció una frase realmente inédita en este tipo de procedimientos: «Entiendo su indignación, entiendo su lucha», aseguró, aunque inmediatamente hizo otra afirmación que puede dar pie a muchas interpretaciones: «A lo mejor es otra jurisdicción la que debería resolver todo esto».

Gloria, la mujer de Rogelio, recordó que su hijo David era un apasionado del tren. «Yo le preguntaba si no tenía miedo con tanta velocidad y él me decía que si pasaba algo el tren se paraba. Pero el tren pasó y no frenó», recordó entre sollozos. «Que no vuelva a pasar por favor, que la seguridad sea lo primero, esto es muy duro de llevar», añadió.