Pione Sisto: «Uno aprende cuando cae y la temporada pasada aprendí mucho»

GRADA DE RÍO

MARTINA MISER

El atacante danés considera que se ha opinado sobre él sin saber y no da pistas sobre su futuro

19 jul 2019 . Actualizado a las 09:59 h.

Pione Sisto ha dado mucho que hablar por sus hábitos alimenticios en los últimos meses y reivindica que el único al que no se le ha pedido opinión es a él. Al darla proclama que intenta hacer lo mejor para sí mismo, sin juzgar a nadie e intentando transmitir a la gente que es una persona más. Admite que ser popular no siempre es fácil, y cree que cuando uno cae es cuando más aprende, por eso la pasada fue para él una temporada de aprendizaje.

-¿Quiere seguir en el Celta?

-No pienso así, no me planteo si quiero seguir o no, cojo lo que venga como venga. Ahora estoy aquí y solo pienso en trabajar y en disfrutar de la vuelta al equipo tras unas largas vacaciones.

-¿Es feliz en Vigo?

-Sí, estoy feliz como persona, y eso es lo más importante independientemente de dónde estés.

-Se ha hablado mucho de que tenía problemas tras confesar que intentó estar 21 días comiendo solo fruta. ¿Qué puede decir sobre ese asunto?

-Lo primero, que nadie me ha preguntado sobre eso, esta es la primera vez que puedo dar mi versión. Nadie sabe lo que he hecho realmente porque nadie me lo ha consultado, la gente habla sin saber y ese es el verdadero problema. Yo dejo que la gente opine y diga lo que quiera. Hago lo que hago por mí y para mí, no por los demás. Si alguien quiere saberlo, que me lo pregunte.

-¿Puede explicarlo entonces ahora que se le pregunta?

-Se trata de que yo tenía muchos problemas físicos: dolor de espalda, en las piernas... No me sentía bien y eran cuestiones que necesitaba solucionar. Ahora todo está funcionando bien y lo hice para conseguir eso, encontrarme mejor. Era ambicioso conmigo, quería volver a sentirme bien.

-¿Consultó con los médicos del Celta o con otros profesionales?

-Es una decisión absolutamente personal, nadie podía solucionarlo por mí, tenía que hacerlo yo mismo, ser responsable. Ahora veo los resultados, así que estoy contento y orgulloso.

-Menciona problemas físicos. ¿Había alguna cuestión psicológica como cansancio o desánimo?

-Por supuesto que todo el mundo tiene momentos malos de ese tipo, son cosas que no hay que tener miedo de expresar. Es importante saber lidiar con las emociones de uno mismo, expresarlas para sentirse mejor. En el mundo del fútbol no es habitual. No quiero dar a la gente una impresión falsa de lo que soy, soy normal como ellos. No hay diferencias.

-¿Es difícil para usted asimilar la popularidad?

-Lo que para mí es importante sobre eso es mostrarle a la gente que no hay diferencias entre cualquiera de ellos y yo. Yo siento que tengo la responsabilidad de hacer que la gente sea consciente de eso, porque es la realidad.

-¿Cómo se sintió la temporada pasada ante su falta de protagonismo en el equipo?

-En Dinamarca, antes de venir a Vigo, estuve siete meses sin jugar, es normal. No estaba lesionado ni nada de eso, simplemente uno no puede estar siempre al mismo nivel. ¿Quién espera que juegues y marques siempre? Es imposible. Cuando uno más aprende es cuando cae, y yo la temporada pasada aprendí mucho.

-Dice que se siente mejor. ¿Está listo para ser un jugador importante en el equipo este año?

-Yo ya soy un jugador importante en el equipo, nadie tiene que decirme eso. Si voy a jugar más o menos depende del entrenador, de lo que quiera y decida.

-¿Y qué opina de Escribá?

-No soy quien para juzgar, cada uno tiene su estilo, su manera de entender y hacer las cosas. Juzgar a la gente es estúpido.

-¿Pero está cómodo con él?

-Me siento cómodo con todo el mundo partiendo de que hay que entender que cada persona tiene su filosofía y que si no juego tal vez no es por mí, sino porque él busca otra cosa. Hay que cambiar el modo de ver las cosas.