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Más de 200.000 euros para garantizar el origen de la uva

Maruxa Alfonso Laya
M. Alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

AGRICULTURA

CEDIDA

La Consellería do Medio Rural pone en marcha los controles de vendimia para evitar situaciones fraudulentas que puedan desvirtuar el sistema de control de la calidad de los vinos gallegos

01 sep 2023 . Actualizado a las 09:45 h.

La vendimia ha comenzado ya en buena parte de Galicia y por eso la Axencia Galega da Calidade Alimentaria (Agacal) tiene ya en marcha los controles que garantizan que la recogida de la uva se lleva a cabo de acuerdo con los normas de los consellos reguladores. Este es un plan propio de la Xunta, que tiene un coste de 200.000 euros, y que busca evitar situaciones fraudulentas que se puedan dar desvirtuando así el sistema general de control de la calidad diferenciada de los vinos gallegos. Este año, el quinto que se desarrolla este programa, 18 personas se encargan de llevar a cabo estos controles.

Quince inspectores de campo y tres ingenieros agrónomos son los responsables de desarrollar este programa, en el que colaboran las cinco denominaciones de origen vitícolas de Galicia. Durante el pasado ejercicio, estos inspectores llevaron a cabo el control sobre 3.400 parcelas, propiedad de 200 viticultores de diferentes denominaciones de origen. En esta ocasión, está previsto que se lleve a cabo el mismo número de controles que en ediciones anteriores. Así, se harán inspecciones a viticultores, bodegas, transportes, centros de aprovisionamiento, controles de capacidad y vigilancias nocturnas y diurnas.

Una parte muy importante de esta campaña se lleva a cabo durante la vendimia, con el fin de verificar la entrada de uva en la bodega, su procedencia y la producción máxima que establecen los consellos reguladores. También se estimará la posible cosecha, para tener una información detallada y poder cotejarla con la producción real que se entrega en la bodega. También se realizarán controles terrestres de uva en las proximidades de las bodegas y en las vías de comunicación ubicadas en el entorno de las parcelas de vendimia. Los inspectores vigilarán, además, los centros de aprovisionamiento y los puestos de compra-venta que puedan existir en el ámbito geográfico de actuación, para garantizar que estén dados de alta en el respectivo consello regulador.

Una vez terminado el período de inspecciones, con los datos recogidos se realizarán informes técnicos, estudios estadísticos y comparativas.