
La bodega utiliza, desde hace años, un sistema de teledetección que analiza y clasifica los viñedos mediante imágenes tomadas desde el aire, lo que le permite programar la recogida de la uva de manera precisa
04 sep 2024 . Actualizado a las 09:42 h.Esta misma mañana, Bodegas Martín Códax dará inicio oficialmente a la recogida de la uva, un proceso que este año se prevé prometedor por la calidad y el equilibrio que presenta la uva. Porque, aseguran en esta firma, un verano con temperaturas óptimas y condiciones secas ha favorecido un desarrollo equilibrado de los viñedos. Como ya viene siendo habitual en esta bodega, la vendimia se programa con la ayuda de drones, que forman parte de un sistema de teledetección que permite a los técnicos realizar la recogida de la uva en su momento óptimo de maduración.
Explican en Martín Códax que las condiciones climáticas jugaron un papel fundamental en la cosecha de este año. Aunque las previsiones iniciales apuntaban a que la recogida comenzaría durante los primeros días de septiembre, un cambio en las predicciones meteorológicas modificó el calendario. Temperaturas más frescas de lo esperado permitirán una maduración más lenta y pausada, sin los excesos de calor que podrían comprometer la recogida de la cosecha. Esto asegura que la uva será vendimiada en su punto óptimo de maduración.
La innovación es una de las señas de identidad de esta bodega, que hace ya años que utiliza las tecnologías avanzadas de teledetección. Estas consisten en un sistema que permite analizar y clasificar los viñedos a través de imágenes captadas por drones, lo que ayuda a programar la vendimia de las distintas parcelas de forma precisa. Este método no solo ayuda a determinar el momento exacto en el que la uva alcanza la madurez óptima, sino que también facilita la clasificación de la producción en función del tipo de uva que se cultiva en cada parcela. Esto es fundamental para la viticultura de precisión, permitiendo que se elaboren diferentes tipos de vino según las características específicas de cada viñedo.
En la bodega reconocen que la producción de este año se estima ligeramente inferior a la del pasado, debido a que hubo una primavera lluviosa, en la que se registraron más del doble de precipitaciones que en un año normal. Estas condiciones dieron lugar a racimos pequeños y menos numerosos, pero con un excelente potencial de calidad. A pesar de la reducción en cantidad, se espera que la cosecha sea de calidad, con un equilibrio ideal entre azúcar y acidez. «Estamos moi satisfeitos coas perspectivas para esta vendima. O equilibrio alcanzado nos viñedos, xunto coas condicións climáticas, permítenos anticipar que será un colleita excepcional en canto a calidade», explica Miguel Tubío, director técnico.
La vendimia ha comenzado con una recogida selectiva de las primeras partidas de uva, que se destinarán a la elaboración de espumosos. El grueso de la tarea comenzará durante la próxima semana y las previsiones meteorológicas favorables permitirán que sea una vendimia tranquila y altamente selectiva, que se prolongará hasta la tercera semana de septiembre.