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«Dificultades» atrasan la liberación del patrón español retenido en Mauritania hace un mes

La Voz EFE/ HUELVA

PESCA Y MARISQUEO

Imagen de archivo de tripulantes de un barco español en Mauritania
Imagen de archivo de tripulantes de un barco español en Mauritania C.

Su abogado denuncia «total indefensión» del mando de un pesquero acusado de la muerte de cuatro tripulantes de una lancha artesanal mauritana

11 ago 2023 . Actualizado a las 11:36 h.

El regreso a España del patrón onubense de un arrastrero con base en Canarias, retenido desde el pasado 14 de julio en Nuadibú (Mauritania) bajo la acusación de haber provocado la muerte de cuatro marineros mauritanos tras una colisión entre la piragua (lancha artesanal) en la que navegaban y el pesquero, se retrasa sine die. Según Fernando Osuna, abogado del patrón del barco, este experimentado marinero natural de Isla Cristina (Huelva) «está encontrando dificultades para su liberación», por lo que no pudo llegar al aeropuerto de Sevilla este jueves, tal y como estaba previsto.

El letrado ha indicado, sin entrar en más detalles, que espera que «pronto se pueda solucionar este dramático caso». Este patrón onubense ha sufrido, según ha indicado Osuna, «una total indefensión: sin abogado y sin haberle entregado el juez ni el atestado ni el resto de actuaciones policiales y judiciales». Su intención es, una vez que llegue a España, «pedir indemnizaciones muy altas», según el abogado, ya que «el sistema judicial y policial de Mauritania ha funcionado muy mal en este caso».

El patrón lleva retenido en esta país africano desde el 14 de julio, siendo el único tripulante del buque en esta situación, ya que el resto de marineros, cerca de una treintena, fueron liberados. La tripulación está formada por españoles, mauritanos, senegaleses y marroquíes, y se les acusaba de ser los responsables de un siniestro en el que cuatro marineros se encuentran desaparecidos, mientras que otros dos que formaban parte del mismo grupo sobrevivieron al accidente, cuyas circunstancias no han sido precisadas y que se produjo en las aguas de la ciudad de Nuadibú, situada a 470 kilómetros al norte de Nuakchot, la capital mauritana.

La falta de dispositivos de salvamento marítimo eficaces en Mauritania y el hecho de que las piraguas utilizadas para la pesca artesanal no cuentan, en la mayoría de los casos, con medios de salvamento adecuados en caso de accidente provocó que no se rescatara a las personas desaparecidas, dadas ya por muertas. El barco afectado es un arrastrero congelador de 33,53 metros de eslora, que desempeña habitualmente su trabajo en aguas africanas mediante convenios de pesca entre distintos países y la Unión Europea.