Salvar delfines con un artefacto que los avisa de que pueden caer en las redes
PESCA Y MARISQUEO
Pesqueros galos lo probarán antes y después de la veda de un mes para proteger cetáceos en aguas francesas
08 dic 2024 . Actualizado a las 04:45 h.Por abrumadora mayoría, la Eurocámara ha respaldado la propuesta de la Comisión Europea para proteger delfines vedando la pesca en aguas atlánticas francesas entre los próximos 22 de enero y 20 de febrero. Ya no coincide con el período de más varamientos en las costas de ese país, según los registros del observatorio galo Pelagis. Mientras España vincula el aumento de los que aparecen muertos en el litoral nacional con la actividad frente a su litoral de arrastreros pelágicos con banderas de Irlanda y Francia, en este último país intentarán protegerlos probando un artefacto que detecta a los delfines y los avisa de que pueden caer en las redes.
Dolphinfree se llama el nuevo aparato, compuesto por una baliza de 23 centímetros de largo por 6,9 de ancho, que «tiene como objetivo limitar la mortalidad de delfines provocada por las actividades pesqueras de los arrastreros pelágicos y de las redes de enmalle», explican desde Pelagis.
«Basándose en el conocimiento bioacústico y cognitivo del delfín, pretende mantenerlos alejados de los barcos», añaden. La baliza acústica «emite una señal comprensible e interpretable para alertarles de la presencia de la red y del riesgo de mortalidad asociado». Se coloca en el aparejo, inicialmente al menos una cada 500 metros.
Comercializada por Octech, desde esta empresa concretan que está concebida «para avisarles de la presencia de la red» y del peligro que puede entrañar. Cuenta «con un módulo de escucha pasiva para identificar la presencia de delfines con el fin de activar la emisión de la señal acústica solo en su presencia», agregan. Así también se «limita la contaminación acústica en el entorno», apuntan los promotores.
El proyecto Dolphinfree lo lidera la Universidad de Montepellier, en colaboración con Pelagis de la Universidad de La Rochelle, el Ifremer (Instituto de Investigación Marina de Francia), Octech, Aglia (Asociación del Gran Litoral Atlántico) y la Organización de Productores Pesqueros de La Bretaña, así como con la contribución de la asociación Conscience Dauphins.
Además de ese disuasor, pesqueros franceses comprobarán cómo funciona el Pifil, también de Octech, empresa que fabrica este artefacto, «compuesto por dos transductores y una caja para ahuyentar a los cetáceos de la zona de riesgo situada en la parte trasera de la embarcación al girar». Con 23 centímetros de largo, 13 de ancho y 9 de alto, «debe permitir insonorizar» durante el lance del aparejo «la zona trasera de la embarcación a cada lado de la estela, así como, en menor medida, la proa».
El Gobierno de París también prevé modificar las normas nacionales «que obligan a 213 buques pesqueros de pabellón francés a estar equipados con dispositivos técnicos para reducir las capturas accidentales de delfines comunes». Uno de los cambios se refiere a los que deberán llevar cámaras a bordo, que pasan de 100 a 115, de los cuales 100 serán de redes de enmalle y 15 arrastreros.
Se propone «estudiar una eficacia de los dispositivos de al menos entre el 30 y el 40 %, optimizando el número de barcos a equipar» con el Dolphinfree y el Pifil. Sin embargo, como estos reflectores acústicos «no están lo suficientemente maduros para ser probados en este contexto, serán objeto de un estudio adicional con barcos voluntarios para ajustar su desarrollo (montaje en la red, efecto sobre las capturas comerciales, uso en trasmallos...)». Este experimento se prolongará hasta el 2026, añade el Ejecutivo francés.