Trump anuncia que se comprará un Tesla tras el descalabro en bolsa de la empresa de Elon Musk: «Están boicoteando al bebé de Elon»

Paulino Vilasoa Boo
P. VILASOA REDACCIÓN

ECONOMÍA

Aaron Schwartz / POOL | EFE

El hombre más rico del mundo ha dilapidado más de 135.000 millones de euros de patrimonio neto desde la llegada al poder del presidente estadounidense

11 mar 2025 . Actualizado a las 16:56 h.

La entrada de Elon Musk en política activa ha supuesto un golpe para la estrategia empresarial del dueño de empresas como Tesla, SpaceX y la red social X. Según el índice de multimillonarios de Bloomberg, el hombre más rico del mundo, cuya fortuna había llegado a su punto máximo el pasado diciembre, con casi 450.000 millones de euros —486.000 millones de dólares— ha perdido más de 135.000 millones de euros —148.000 millones de dólares, según el cálculo exacto— de patrimonio neto desde el 17 de enero, unos días antes de que el presidente de Estados Unidos tomase posesión pero con Musk ya encargado de funciones cruciales para el nuevo Gobierno.

Solamente este lunes, Musk habría seguido con la sangría de patrimonio, con una pérdida de 29.000 millones de dólares en un solo día, especialmente por el descalabro en bolsa de Tesla, que se desplomó un 15 % en Bolsa, dilapidando todas las ganancias logradas desde la victoria de Donald Trump en noviembre y castigando al Nasdaq con su peor caída desde el 2022, del 4 % a la baja en el cierre de los mercados

La labor política de Musk, como máximo escudero de Trump y a veces mamporrero en redes para defender las estrategias del presidente, ha lastrado su fortaleza empresarial. Por eso, no es sorprendente el apoyo expreso del máximo mandatario estadounidense, que ha querido echarle una mano, anunciando en su red social Truth que adquirirá en los próximos días un Tesla para luchar contra el boicot del que está siendo objeto, en su opinión.

En un mensaje dirigido «a los republicanos, los conservadores y a todos los grandes estadounidenses», Donald Trump ha defendido a Musk como un gran patriota que está haciendo un «fantástico trabajo por su nación», y culpa a los «lunáticos de la izquierda radical» de tratar de «boicotear de forma ilegal y a través de confabulaciones» a Tesla, a la que define como «uno de los grandes fabricantes de automóviles del mundo» y también como «bebé de Elon»

«¿Por qué debería ser castigado por poner sus formidables habilidades a disposición de hacer América grande de nuevo?», se pregunta Trump, que, por ello, se ha comprometido a adquirir uno de sus vehículos eléctricos como demostración de su respaldo incondicional. «Me voy a comprar mañana mismo por la mañana un Tesla como muestra de confianza y apoyo a Elon Musk», ha declarado.

La estrategia ya parece haber dado sus frutos, ya que tras estas palabras del presidente, Tesla ha rebotado alrededor de un 5 % en las operaciones previas a la apertura de los mercados, lo que supondría su mayor subida en cuatro años, aunque no llega a compensar el desplome de la jornada previa.

Elon Musk confirma que está sufriendo «grandes dificultades» para dirigir sus empresas

En medio de esta gran caída en sus fortunas personales, Elon Musk ha dado una entrevista a la cadena Fox, donde se ha desplomado y, desconcertado y casi al borde del llanto, ha explicado que está sufriendo «grandes dificultades» para dirigir sus empresas desde que asumió su labor a los mandos de la agencia DOGE.

Así respondió al entrevistador, Larry Kudlow, que le preguntó si, ante su nueva función en el Gobierno, estaba dejando de lado la gestión de las empresas como explicación al hundimiento de las acciones. «Es decir, ¿cómo estás gestionando tus otros negocios?», cuestionó.

A Musk le costó dar una respuesta inmediata. Primero soltó una risa nerviosa, dijo luego entre dientes ese escueto «con gran dificultad» y, tras un silencio largo e incómodo, intentó empezar a dar una explicación que nunca llegó. Acabó eludiendo la cuestión directa para defender los avances de su labor en el Gobierno: «Yo solo estoy aquí para hacer la administración más eficiente, eliminar los gastos y el fraude, y de momento estamos haciendo grandes progresos», le dijo.

Tesla, ante una encrucijada

La empresa de automóviles eléctricos estadounidense vive uno de sus momentos más débiles tras las últimas acciones de Elon Musk, que se ha erigido en el gran valedor de las políticas de Trump y se ha enfrentado públicamente con todos sus críticos, en muchas ocasiones con malas formas. La estrategia del hombre más rico del mundo, sin filtros en su propia red social, X, se ha visto manchada también por su intento de injerencia en la política de ciertos países europeos, apoyando en Alemania al ultraderechista AfD en las pasadas elecciones o con ataques furibundos y personales hacia las políticas del primer ministro británico Keir Starmer.

En los últimos días, acabó protagonizando un rifirrafe con el ministro de Asuntos Exteriores polaco tras ilustrar las consecuencias que tendría para Ucrania que los dejase sin su sistema de comunicaciones Starlink, lo que muchos interpretaron como una amenaza.

Todos sus movimientos recientes, especialmente desde la toma de posesión de Donald Trump, han provocado una huida de los principales compradores de sus vehículos Tesla, que en Estados Unidos eran especialmente votantes demócratas y progresistas.

También en Europa, donde las ventas se han desplomado de manera vertiginosa. El mayor descalabro ha sido en Alemania, con una caída de casi el 80 % con respecto al año anterior, pero también en el resto de países, especialmente en España, Francia, Portugal, Dinamarca y Noruega. Lo mismo ha sucedido en Australia, con un 72 % menos de matriculaciones o en China, donde han bajado un 49 %. Solo el Reino Unido permanece inmune, y Tesla ha conseguido un aumento del 25 % en las islas británicas en febrero.

Mientras, los coches eléctricos chinos, la otra gran amenaza a la que se enfrentaba Tesla, no dejan de subir en cuota de mercado a pesar de los duros aranceles que tienen que soportar en la UE. En Galicia, el 53 % de los modelos eléctricos vendidos este año ya son fabricados en el gigante asiático.