España intentará limitar el impacto de la peste porcina y desbloquear el veto de una veintena de países al porcino español
GANADERÍA
Luis Planas manda un mensaje de tranquilidad y prudencia porque el abastecimiento «está asegurado» y porque esta patología «no se transmite por la ingesta de carne de cerdo y sus derivados».
29 nov 2025 . Actualizado a las 18:28 h.España «peleará, porque lo peleamos todo, expediente a expediente, por país y certificado por certificado» para ir devolviendo la normalidad a las exportaciones de porcino español. Y también tratarán de negociar con la veintena de países que, al no tener acuerdos de regionalización, tienen bloqueadas las exportaciones de cerdo y sus derivados después de haberse confirmado varios casos de peste porcina africana en la provincia de Barcelona. Es lo que avanzó esta mañana el ministro de Agricultura, Luis Planas, durante una rueda de prensa en la que lanzó un mensaje de «tranquilidad y prudencia» a la población y al sector.
Tranquilidad para los ciudadanos porque «el abastecimiento de carne de porcino está asegurado» y porque esta patología «no se transmite por la ingesta de carne de cerdo y sus derivados». Y prudencia para el sector porque, en un contexto como el actual, es necesario extremar todas las medidas de vigilancia y bioseguridad para evitar que la peste porcina africana (PPA) se extienda más allá de la zona de 20 kilómetros en torno a los focos que se ha encapsulado para evitar la propagación. Porque contener la enfermedad es fundamental para minimizar las consecuencias económicas en un sector cuyas exportaciones a 104 países de todo el mundo alcanzaron el año pasado los 8.800 millones de euros, de los que 5.100 millones corresponden a productos comercializados dentro de la UE. Y como dijo el ministro, las exportaciones intracomunitarias no se verían afectadas, salvo las de las 39 granjas radicadas dentro de ese radio de 20 kilómetros.
La cuestión ahora es ver qué puede pasar con las exportaciones a terceros países, que suponen unos 3.700 millones de euros, de los que 1.100 millones se corresponden con todos los productos porcinos que España envía a China. En este sentido, Luis Planas explicó que en estos momentos un tercio de los 400 certificados de exportación para productos de porcino y derivados continúan paralizados, pero explicó que se está trabajando para que puedan desbloquear «a la mayor celeridad». Y de los 104 países a los que nuestro país envía porcino, existen 44 que exigen certificados específicos para la PPA. De ellos, hay 24 que reconocen la regionalización y otros 20 que no.
La regionalización implica que, en caso de detectarse casos de PPA como ha ocurrido, podrán continuar realizándose exportaciones desde España, salvo de la zona restringida. Esta zona dependerá del acuerdo comercial suscrito con cada país. Precisamente el pasado 12 de noviembre España suscribió un acuerdo con China, el principal receptor de productos de cerdo españoles fuera de la UE, para regionalizar la comercialización de productos del cerdo y derivados. En el caso de este estado, el veto afectaría únicamente a las explotaciones e industrias ubicadas en la provincia de Barcelona. Pero todavía se está clarificando cómo quedará el acuerdo, como adelantó el ministro. «Es la provincia de Barcelona la que quedaría excluida de las exportaciones y estamos en contacto con las autoridades chinas (...) Nada más puedo indicar en este momento», dijo. Otros países que aceptan la regionalización son, por ejemplo, Filipinas, Corea del Sur, Reino Unido o Serbia.
En cambio, otros mercados con peso para el sector como Japón, Malasia, Taiwán, Vietnam o México no la aceptan y, por tanto, tienen vetados los productos de cerdo españoles. De hecho, el Gobierno mexicano ya ha informado de que suspenderá la importación de productos porcinos de España. En este caso, como dijo Planas, «nuestra tarea es intentar limitar, a través de las consejerías y de las oficinas comerciales de España, el impacto económico en un sector muy profesionalizado como es el porcino». De hecho, destacó que este goza de unos altos estándares de calidad y control que le han permitido abrir un amplio mercado exterior. Además, recordó que el sector porcino representa el 40% de la producción final ganadera y el 17% de la producción final agraria. España es el primer productor de la Unión Europea y el tercero del mundo después de China y de Estados Unidos.