Guerra abierta contra los elaborados veganos que imitan pescados y carnes
PESCA Y MARISQUEO
Anfaco, Anice y Aviance exigen al Gobierno que frene «mensajes falsos que pretenden inducir a error al consumidor»
21 feb 2024 . Actualizado a las 08:05 h.Ya han pasado siete años desde que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea sentenció que la leche de avena o el queso de tofu no existen. Los nombres de los productos lácteos están reservados para alimentos de origen animal, no vegetal. Sin embargo, en supermercados y tiendas siguen vendiéndose imitaciones de atún, pollo o carne que en realidad son derivados de proteínas vegetales, en algunos casos ultraprocesados. Ya lo ha denunciado repetidamente todo el sector del mar, pero de momento el Gobierno español no ha intervenido.
Ahora, la patronal conservera Anfaco-Cecopesca, la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice) y la Asociación Interprofesional Española de la Carne Avícola (Avianza) se unen emplazando al Estado a frenar una práctica que «pretende inducir a error al consumidor». A él se dirigen con la campaña #CadaCosaPorSuNombre, para que no caiga en ese engaño.
De un modo muy gráfico, el mensaje se resume en que «un preparado de guisantes no es una costilla de cerdo vegana», como tampoco hay merluzas veganas ni piezas de ave veganas. Se proponen «sensibilizar a la opinión pública sobre la verdadera composición» de esos productos, para que sea consciente de que han sido elaborados «con el objetivo de imitar y desplazar a los productos de origen animal».
«Mensajes publicitarios falsos»
Desde Anfaco, Anice y Aviance no dudan en calificar de «mensajes publicitarios falsos» los empleados para comercializar imitaciones de pescados y carnes, algo que en su opinión constituiría «competencia desleal».
Primero, porque «se presentan como ventajosos en el ámbito de la salud», pese a que, subrayan, «nunca podrán sustituir nutricionalmente a los productos de origen animal». Entre otras razones, porque estos últimos destacan por la calidad de sus proteínas, minerales, vitaminas o, en el caso de los marinos, por sus esenciales ácidos grasos omega-3.
Segundo, porque, aunque se promocionan «aludiendo a que su consumo beneficia al medio ambiente o es más responsable», lo cierto es que las tres organizaciones consideran que «se adolece una comparativa rigurosa de la huella de carbono o hídrica» de los elaborados veganos, así como del origen de sus ingredientes. No vaya a ser, apuntan, que al conocerlo se «podría justamente concluir que —acabasen— siendo más perjudiciales para el medio ambiente».
Dirigentes de Anfaco, Anice y Aviance se reunieron ayer con Daniel Arribas, director general de Consumo, a quien informaron de su «alianza estratégica e inédita» y de la campaña con la que esperan generar «una revisión profunda en el Gobierno de España». Confían en que más pronto que tarde actuará «demostrando su defensa por una información alimentaria leal, veraz y transparente» que no confunda al consumidor.
Si bien el Reglamento de Información al Consumidor de la Unión Europea ya «recoge elementos de actuación», durante la reunión entre las tres organizaciones y el dirigente estatal analizaron los proyectos legislativos que ultiman en países como Francia o Italia. Serían un posible modelo a seguir en España, porque restringen el uso de nombres comerciales de productos de origen animal, «estableciendo porcentajes mínimos de contenido en los ingredientes, entre otras medidas».
Llaman a revisar los lineales
Al director de Consumo también le reiteraron la necesidad de actuar desde las Administraciones públicas, revisando los lineales de los supermercados y tiendas para comprobar que los elaborados veganos que imitan pescados y carnes «cumplen la normativa de información alimentaria en cuanto a menciones del envase o publicidad del producto».
Anfaco, Anice y Aviance también reivindican en su comunicado el «vital» papel económico y social de la industria alimentaria a la que representan.