La compañía de teatro aficionado The Lunatics, que se gestó en un club de lectura, estrena obra este fin de semana
30 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.«Si para hablar en inglés en público ya nos cuesta soltarnos, imagínate subirnos a un escenario a actuar y contar historias en un idioma que no dominas», argumenta Marta Viana. La suya fue una reacción generalizada que tuvieron la mayor parte de los miembros de The Lunatics Theatre Company, un grupo aficionado de teatro cuya particularidad más exclusiva es que todas las obras que representan las hacen en inglés. Lejos de darles la razón, vivir la experiencia se la ha quitado porque han comprobado que romper esa barrera les ha servido para liberar no solo la lengua, sino también la mente usando el cuerpo para expresarse.
Tenían miedo, pero se embarcaron igual porque además había una enorme confianza en el patrón de ese barco, que es el inglés Patrick J. S. Freeman, profesor y conductor de varios grupos de lectura de inglés en Vigo. La compañía nació a finales del 2019 y su desarrollo fue lento porque al poco de empezar llegó la pandemia. «Lo teníamos todo preparado para el estreno y dos semanas antes nos confinaron», recuerda el profesor que junto a sus alumnos, también ha aprendido algo, en su caso, a convertirse en director de escena, algo de lo que, reconoce, no tenía ni idea. «Cuando les cuento a mis amigos de Inglaterra que dirijo un grupo de teatro se parten de risa», admite, aunque cuenta que en la academia con la que colabora, en los campamentos de verano ha trabajado esa faceta montando obras con los niños, «pero esto es diferente» y además, asegura que le encantan los retos.
Tras ese paréntesis inicial, en el que estuvieron más de medio año ensayando a distancia a través de la plataforma Zoom, en abril del 2022 el grupo representó su primera obra en el auditorio del Centro Cívico de Teis. Se trataba de A Queen and three slaves, una farsa de Richard Caulfeild Goodman ambientada en el antiguo Egipto.
Patrick es un viejo conocido de Vigo, ciudad a la que llegó hace once años «en Vespa», subraya, atraído por una oferta laboral que terminó siendo para él. Más tarde se ocupó de coordinar el club de lectura en inglés de a Biblioteca Juan Compañel. Fue de allí de donde salió la idea de montar un grupo de teatro. «Fue interesante, porque de los que lo propusieron, ninguno llegó a formar parte», cuenta con ironía el londinense formado en Trabajo Social que dejó su profesión para irse a dar clases a Italia. Actualmente, casi la mitad de la compañía aficionada tiene relación con ese club en el que comentan libros en la lengua de Shakespeare, que continúa funcionando.
En julio del 2023, The Lunatics volvieron al escenario en el mismo auditorio con el estreno de dos nuevas piezas, también en tono de comedia: Murder at Merryweather Mansion, de Lauren Jones y Duck!?, de Bob Tucker. El próximo sábado, 3 de febrero, presentan una versión mejorada de ambas obras, esta vez en el Auditorio de San Miguel de Oia, gracias a la colaboración de la Asociación Vecinal responsable de este centro. «La entrada es gratuita y además el público podrá conocer la labor de Avempo (Asociación Viguesa de Esclerosis Múltiple de Pontevedra), y, si lo desea, realizar algún donativo», advierten.
La formación está completa ahora mismo porque están a punto de estrenar la pieza, pero se reúnen todos los lunes en el Centro Cívico del Casco Vello de 19.00 a 20.30 horas y, como señala Patrick, «no estamos buscando gente, pero una o dos personas más podría entrar, de hecho el año pasado vino una nueva y este, otra», lo que no altera el carácter de un grupo donde ya se han establecido fuertes alianzas.
El director también explica que esta actividad, más que para aprender, sirve para entrenar la posibilidad de expresarse emocionalmente en inglés», señala el maestro, que añade que «hay un buen nivel del idioma, incluso hay docentes en esta lengua, y otros no tienen tanta soltura, pero para eso está el proyecto, es un grupo muy animado y con mucho entusiasmo», asegura. Lo confirma una de las nuevas en la materia, Ana Bravo, maestra viguesa que llevaba décadas fuera y regresó a su ciudad hace seis años: «Nunca en mi vida había hecho teatro y para mí ha sido un descubrimiento de mis propias capacidades», afirma, encantada con la experiencia.