La venta de billetes de Renfe sigue defraudando con una apertura mínima de cinco días

GALICIA

La operadora amplía el período de adquisición desde el 28 de mayo al 1 de junio, mes en el que se espera la nueva oferta
24 abr 2025 . Actualizado a las 19:55 h.El sistema de venta de billetes de Renfe sigue actuando de forma caprichosa, eludiendo la necesidad de los usuarios de planificar sus viajes con una antelación razonable en las conexiones gallegas de alta velocidad. La operadora pública ha desbloqueado de nuevo la venta, pero de forma muy limitada. Si después de la apertura del pasado 1 de abril se fijó en el 27 de mayo el último día para adquirir billetes, ahora se pueden reservar plazas desde el 28 de mayo hasta el domingo 1 de junio, mes en el que está previsto que la compañía pública estrene su nueva parrilla de servicios.
De esta forma, las nuevas jornadas en las que se desbloquea la adquisición de billetes no incluyen ningún cambio reseñable en la oferta, por lo que extraña aún más que no se pusieran antes a disposición de los potenciales compradores.
En la que se supone que será la oferta definitiva hasta la llegada del nuevo material rodante de la serie 107, se prevé que se incorporen nuevos trenes de alta velocidad de la serie 106 (Talgo Avril) y dejar un único Alvia que realizaría la ruta Madrid-Ourense-Lugo-Ferrol.
Los cambios periódicos que sufre la conexión Galicia-Madrid, que afecta también a los servicios de media distancia, es el argumento que esgrime Renfe para justificar la falta de antelación que sufren los usuarios gallegos o los del resto de España que desean viajar en ferrocarril a Galicia. En otros corredores de alta velocidad no ocurre esto y los clientes de la operadora pública pueden contratar sus títulos de viaje hasta el 14 de diciembre, fecha en la que se coordinan los surcos ferroviarios europeos. También es verdad que en esas conexiones Renfe tiene dos operadoras —Iryo y Ouigo— que compiten con ella, por lo que en este caso la falta de antelación redundaría en una fuga de clientes hacia la competencia.
En Galicia el escenario es muy diferente. Renfe se beneficia de una línea de alta velocidad con dos anchos —internacional e ibérico— que bloquea al menos hasta el 2030 la entrada de competidores —que podrían operar antes solo hasta Ourense—, obligados a adquirir un material rodante de ancho variable que en la actualidad solo tiene Renfe. Esta barrera técnica perpetúa el monopolio de la operadora estatal en Galicia y, por tanto, la relación con los potenciales clientes es muy diferente.
En la conexión gallega de alta velocidad, por contra, la fuga de viajeros se produce hacia el modo aéreo, como constataron decenas de testimonios de usuarios en el buzón que La Voz habilitó en su web para reflejar esta problemática y que ahora se amplía para que cuenten su experiencia con el servicio ferroviario. Ante la imposibilidad de reservar billetes de tren, optan por el avión para poder asegurarse un buen precio y la llegada a sus eventuales enlaces.
Renfe se acerca al beneficio tras reducir en el 2024 sus pérdidas a tres millones de euros
Renfe rozó su vuelta al beneficio en el 2024 tras siete años en números rojos, una vez que ha logrado reducir las pérdidas de 121,5 millones de euros que registró en el 2023 a tan solo 2,95 millones de euros, lo que supone recortar en 118,6 millones de euros las pérdidas del año anterior.
El incremento de los ingresos (importe de la cifra de negocios más otros ingresos de explotación), que alcanzaron los 4.122,6 millones de euros, fue uno de los impulsos en la mejora en los resultados del grupo ferroviario estatal, tras crecer un 5,5 %.
A este avance contribuyó especialmente el aumento de la demanda, con nuevos servicios y frecuencias, así como una contención general de los costes operativos, según defiende Renfe en un comunicado. Esta evolución favorable entre los ingresos y costes del grupo tuvo, asimismo, una repercusión directa en el resultado operativo, disparando un 59 % el resultado bruto de explotación (Ebitda), hasta los 489,5 millones de euros.
Este resultado del conjunto del grupo viene respaldado por la evolución positiva de varias de sus filiales, algunas de las cuales alcanzaron cifras relevantes desde la pandemia de Covid-19, que dio lugar a una fuerte contracción de la demanda y de los ingresos durante varios ejercicios.
Es el caso de Renfe Viajeros, la filial de la compañía enfocada a la operación de transporte de viajeros y la prestación de servicios turísticos, que logró un beneficio después de impuestos de 5,4 millones de euros en 2024, frente a las pérdidas de 65 millones de euros del 2023.
En este sentido, Renfe consiguió en el 2024 su récord histórico de viajeros transportados en un año, con más de 535 millones de pasajeros, un 2,3 % más, al sumar sus servicios públicos (cercanías, media distancia, ancho métrico y Avant) y sus servicios comerciales (AVE, Avlo, Alvia, Euromed e Intercity).