Este esfuerzo incluye la instalación de 11 paneles explicativos en la lonja de O Xufre y en el aula de interpretación «O Canto do Mar», así como la distribución de folletos informativos para clientes y ciudadanos interesados
26 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La Organización de Productores de Marisco y Cultivos Marinos de la Provincia de Pontevedra, conocida como OPP20, ha llevado a cabo una ambiciosa iniciativa para reforzar la promoción y trazabilidad de los productos marinos extraídos en A Illa. Este esfuerzo incluye la instalación de 11 paneles explicativos en la lonja de O Xufre y en el aula de interpretación «O Canto do Mar», así como la distribución de folletos informativos para clientes y ciudadanos interesados.
La estrategia de comunicación se extendió a las redes sociales, donde la repercusión fue notable. En Instagram, se registraron más de 15.000 visualizaciones y un alcance superior a 7.000 personas, mientras que en Facebook las cifras ascendieron a 55.000 visualizaciones y 34.000 personas alcanzadas. Estas cifras reflejan el impacto de la campaña para dar a conocer el origen y el proceso de comercialización de los productos de la OPP20, que ahora cuentan con una sección web dedicada donde los consumidores pueden consultar información sobre las embarcaciones y mariscadores implicados.
Los productos de la OPP20 están avalados por prestigiosas certificaciones, como el sello CRAEGA para la agricultura ecológica de algas, el distintivo PescadeRías que garantiza el origen en las Rías Gallegas y la marca propia «Marisco de A Illa», que certifica su procedencia. Estos sellos están integrados en las etiquetas de los productos desde su clasificación en la lonja hasta su venta, tras superar los controles de tamaño y límites diarios de extracción.
El proceso de registro se realiza mediante el programa Xesmar, que documenta la actividad de los mariscadores, el banco marisquero utilizado y la cantidad extraída por especie. Posteriormente, los datos se integran en el software de gestión de lonjas SAECDATA, que permite verificar la trazabilidad de cada lote, desde su origen hasta su comercialización. La venta de los productos se realiza mediante un sistema de subasta electrónica a la baja, donde el precio inicial, fijado por la OPP según la especie y la temporada, disminuye hasta que un comprador lo detiene. Este proceso, visible en pantallas, permite seleccionar lotes mediante lectores electrónicos, asegurando precisión y transparencia.