El colectivo denuncia que actualmente cada avería o fuga de carburante de la maquinaria y barcos de los distintos muelles acaba «irremediablemente» en las aguas de la ría.
Clara Millán cree que mientras Corina Porro «no tenga a bien implicarse como única persona con competencia para parar las obras, el caso tendrá difícil solución».