O xornalista di que cambia de traballo, pero non tanto: «O labor tamén é informativo, hai que contar aquí en Madrid todo o que somos e facemos os galegos, difundir a nosa cultura e a nosa lingua»
El gracioso momento tuvo lugar en el popular concurso cultural. Con una serie de letras debían formarse dos palabras. Una que sirviera para definir a un «enterrador» y otra equivalente a «infiel». La concursante solo acertó una de ellas pero dejó con la otra estupefacta a la audiencia